Un espacio único, atractivo y natural que te hará olvidar el ajetreo del día a día y sumergirte en el mundo de la pesca deportiva.
El terreno pertenecía a una antigua extracción de inertes, la cual fue desactivada hace más de 50 años; tiene unas 6 hectáreas y 2 estanques de 2 hectáreas cada uno, donde podemos encontrar una fauna y flora perfectamente adaptada a su entorno.
Con todas las comodidades necesarias, bungalows, WC, vestuarios, WI-FI, electricidad y agua de la red.
El buen humor y el buen servicio de João Seco y Filipa Reveles te esperan.